Radiografía de… Papilla Mango Heinz

La información contenida en esta radiografía de producto, podría tener modificaciones debido a la reformulación que la industria de alimentos y bebidas ultraprocesados realiza constantemente. Te sugerimos que verifiques la fecha de publicación de la radiografía.

8 diciembre, 2015 | : Análisis de productos

HeinzPapillaMango

  • El segundo ingrediente es azúcar.
  • Sólo la mitad del producto es mango, el resto es azúcar, almidón y harina de arroz.
  • Se promociona para bebés mayores de seis meses cuando el azúcar añadida está contraindicada en lactantes.

8 diciembre 2015. Échale un vistazo a nuestras radiografías de productos: sencillas, concisas y completamente documentadas.

 

Papilla Mango Heinz (113 gramos, envase):

 

Azúcares:

10.6 gramos de azúcar añadida.1

El total de azúcar en el producto es de 15.7 gramos, lo que engloba el azúcar natural del mango y el azúcar añadida.

La cantidad de azúcar añadida en la papilla es lo equivalente a dos cucharadas cafeteras de azúcares.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la recomendación para lactantes es que “el azúcar debe ser evitada debido a que pueden dañar los dientes de los niños, provocar sobrepeso u obesidad y reducen el apetito del niño, por lo que éstos no consumen alimentos más nutritivos”.2

La cantidad de azúcar añadida aparte del azúcar natural del mango es excesiva, ya que no tiene una razón de ser.

Justo a los seis meses de edad los infantes se encuentran en periodo de conocer los sabores naturales de los alimentos, por lo que al añadir azúcar les merma este proceso.3

Otro elemento importante con respecto a la cantidad de azúcares en alimentos para lactantes es el carácter adictivo propio del azúcar que se genera ante el alto consumo de la misma.

pure mango bebe porciónPara un bebé que se encuentra en pleno desarrollo y en donde sus neuronas y demás células aún se encuentran en crecimiento, este carácter adictivo con la sustancia cobra mayor relevancia.

Aquí mostramos la porción del empaque, pues a través de la misma logramos observar que inclusive para dicha porción de producto es una cantidad excesiva añadir dos cucharadas cafeteras de azúcar. En la imagen se utiliza un utensilio casero para que los padres de familia puedan visualizar la porción real del producto.

Ingredientes:

Mango (51%), agua, azúcar, almidón modificado, harina de arroz, acido cítrico, vitaminas (C, B3, B2, B1 y A).

Sólo la mitad del producto es mango, el resto es azúcar, almidón, y harina de arroz.

Lo más preocupante es el azúcar añadida y el almidón modificado que regularmente proviene de maíz transgénico, que a su vez es cultivado con intensa aplicación de pesticidas.

Además, los productos no vienen etiquetados alertando a los consumidores si éstos contienen ingredientes que provienen de alimentos transgénicos.4

Etiquetado:

El etiquetado frontal contiene una imagen de una jirafa en forma de caricatura, con imágenes de mangos naturales.

También contiene una leyenda indicando la edad, que es a partir de seis meses.

Sin embargo, por ningún lado se indica el azúcar añadida ni que tan sólo la mitad del producto es fruta, sino que se hace parecer que el producto es en su totalidad una papilla de mango natural.

Esto resulta engañoso, ya que padres de familia podrían percibir que el producto es saludable y adecuado para sus bebés, cuando realmente no lo es.

Es frecuente que padres de familia (especialmente padres o madres primerizas) recurran a este tipo de productos como alternativa a las papillas hechas en casa con la creencia de que son productos sanos.

El etiquetado y presentación hacen ver al producto como un alimento apto para un niño pequeño, pero por la cantidad tan elevada de azúcar añadida es inclusive contraindicado, especialmente para consumo frecuente o para iniciar la alimentación de los pequeños.

Padres y madres de familia deberían contar con mayor información que realmente les orienten en los etiquetados y así poder seleccionar productos que no generen daño a sus hijos, como es el caso de esta papilla.

Para un bebé de seis meses no es recomendable la ingesta de azúcares añadidos, mucho menos en cantidades tan elevadas.

Un elemento adicional que preocupa del etiquetado de la papilla Heinz es que viene avalado por la “Asociación Latinoamericana de Pediatría-ALAPE”.

Es riesgoso que ciertas asociaciones avalen este tipo de productos, ya que frecuentemente las mismas desconocen a detalle la calidad o ingredientes de los productos que avalan, sino que se avalan de acuerdo con la información que presenta el promotor.

También se dan los casos en que estas asociaciones realizan alianzas con la industria de alimentos y bebidas, lo que les genera un conflicto de interés.

Por ejemplo, la ALAPE estará organizando próximamente un Congreso Latinoamericano de Pediatría en Perú, que está siendo patrocinado por grandes trasnacionales que han sido protagonistas en la epidemia de sobrepeso, obesidad y diabetes, como Nestlé, Coca-Cola, Mead Johnson, etc. (ver www.alape2015.com/patrocinadores.html).

Nuestra valoración:

Producto no apto para su consumo en lactantes, ya que contiene altas cantidades de azúcar añadida.

Un niño o niña preescolar o escolar lo podría consumir como postre.

Te proponemos:

Puré de mango natural hecho papilla con tenedor.

También se podría tomar el mango y raspar con la cuchara directamente de la fruta para obtener la pulpa.

De preferencia optar por la compra de fruta proveniente de pequeñas y pequeños productores.

_____________________________________

  1. OPS e INCAP (2012). Tabla de composición de los alimentos de Centroamérica.
  2. OMS (2010). La alimentación del lactante y el niño pequeño: capítulo modelo para libros de texto dirigido a estudiantes de medicina y otras ciencias de la salud. apps.who.int/iris/bitstream/10665/44310/1/9789275330944_spa.pdf.
  3. Verma et al. (2011). A Review on Impacts of Genetically Modified Food on Human Health The Open Nutraceuticals Journal, 4, 3-11. Disponible en: benthamopen.com/contents/pdf/TONUTRAJ/TONUTRAJ-4-3.pdf.
  4. Flores-Huerta S, et al. (2006). Alimentación complementaria en los niños mayores de seis meses de edad. Bases técnicas.Bol Med Hosp Infant Mex; 63: 129-144. Disponible en: www.scielo.org.mx/pdf/bmim/v63n2/v63n2a8.pdf.

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