Marcas comerciales (lo que ocultan) J-L

28 mayo, 2008 | : Salud nutricional

Esta lista es dinámica: se actualiza con regularidad, para ofrecerte más y mejor información.

A – C (Bimbo, Coca Cola, Burger King…)

D – F (Dupont, Exxon…)

G – I (Google, Herdez, Hershey’s…)

J – L (Kellogg’s, Lala…)

M – O (Marlboro, Mattel, McDonald’s, Mead Johnson, Microsoft, Monsanto, Nestlé, Nike…)

P – R (Pepsico, Pemex, Quacker…)

S – V (Starbucks, Televisa, Telmex…)

W – Z (Wal-Mart…)

J

K
Kellogg’s. A pesar de que sus productos “para niños” poseen escaso valor nutricional y sería recomendable que sólo fueran ingeridos esporádicamente, según las normas de la Agencia de Estándares en Alimentos del Reino Unido, la empresa engaña a los consumidores al promover estos productos como alimentos “sanos” y proponer que los niños los ingieran diariamente, incluso en sustitución del desayuno o la cena. El Poder del Consumidor evaluó bajo el esquema inglés los cereales Choco Krispis, Chokos, Corn Pops, Froot Loops, Zucaritas y Honey Smacks, las barras de cereal Zucaritas, Froot Loops y Choco Krispis, así como con la leche de sabor Choco Melvin, y encontró en todos ellos que por su elevado contenido de azúcar y de harinas refinadas estos productos tendrían que ser vistos como golosinas o caramelos líquidos, cuyo consumo debe ser esporádico. Asimismo, la organización civil ha presentado denuncias ante la Secretaría de Salud, la Secretaría de Gobernación y la Procuraduría Federal de Protección al Consumidor en contra de anuncios televisivos de Zucaritas y Choco Krispis por su intención manifiesta de engañar y manipular a los niños, deformando sus hábitos alimenticios. La publicidad televisiva de Kellogg’s es la más agresiva entre los productores de alimentos para niños. Esta empresa es la única que insiste en sugerir que el consumo de su producto permite desarrollar habilidades físicas increíbles, explotando la credulidad infantil. Esto lo refuerza con tretas como el uso de personajes animados, regalos de moda, frases engañosas y su lema “vivimos para nutrirte”. En México y en Estados Unidos, esta empresa ha firmado acuerdos para “autorregular” su publicidad, incluso reconociendo “la vulnerabilidad especial de los niños, por ejemplo, su inexperiencia, inmadurez, su susceptibilidad a ser engañados o excesivamente influenciados, y su carencia de herramientas cognitivas necesarias para evaluar la credibilidad de la publicidad”. Sin embargo, en los hechos tal autorregulación no ocurre, la empresa establece sus propios parámetros (muy elevados) y de esta manera evita la intervención regulatoria del Estado así como demandas civiles.

L
Lala. Produce la leche de sabor Yomi para niños, sin advertir que por su elevado contenido de azúcar debe ser considerada un caramelo líquido y por lo tanto su consumo debe ser esporádico. Reemplazar la leche natural por este producto provoca un deterioro de los hábitos alimenticios y contribuye a fomentar la epidemia de sobrepeso y obesidad que vive México.