Demandamos impuesto al refresco
• Los mexicanos presentamos el mayor consumo de refrescos en el mundo, con 163 litros por persona en promedio al año.
• Un impuesto del 20% al refresco daría recursos superiores a los $20,000 millones de pesos, calcula el Instituto Nacional de Salud Pública.
• Sólo un 10% de lo recaudado serviría para instalar bebederos de agua en todas las escuelas y otro 10%, en las comunidades más marginadas del país.
• Pedimos destinar recursos a la instalación de bebederos de agua en todas las escuelas, espacios públicos y comunidades marginadas.
3 septiembre 2013. Miembros de la ALIANZA POR LA SALUD ALIMENTARIA —de la que somos parte— acudimos a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para demandar un impuesto al refresco y destinar parte de los recursos recaudados a iniciar una ‘revolución contra la obesidad’ con la introducción de bebederos de agua en todas las escuelas y espacios públicos.
Los mexicanos presentamos el mayor consumo de refrescos en el mundo, con 163 litros por persona en promedio al año. Este consumo, por sí sólo, aumenta el riesgo de obesidad y diabetes, por lo cual, no es una coincidencia que los mexicanos presentemos los mayores índices de sobrepeso, obesidad, diabetes y muerte por diabetes, entre los países de la OCDE.
“La epidemia de obesidad y diabetes que afecta a los mexicanos no puede entenderse sin la ausencia de bebederos de agua en todo el país. La falta de acceso a agua para beber de manera casi absoluta en la mayoría de las escuelas, los espacios públicos y la omnipresencia de los refrescos y su publicidad indiscriminada está en la base de esta epidemia. El Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) calcula que un impuesto del 20% al refresco daría recursos superiores a los $20,000 millones de pesos. Nosotros calculamos que con solamente un 10% de lo recaudado se podrían instalar bebederos de agua en todas las escuelas y, con otro 10% en las comunidades más marginadas del país” señaló Xaviera Cabada, nuestra coordinadora de Salud Alimentaria en El Poder del Consumidor.
Advertimos, asimismo, que la estrategia comercial que ha lanzado la industria refresquera va a tener un impacto aún mayor sobre la salud de los mexicanos.
“La estrategia va dirigida a aumentar el consumo de los ya consumidores de refrescos y aumentar el consumo al interior de las familias. La oferta de mayor cantidad de bebida a menor precio en envases de 2.5 litros a un precio menor que el agua en presentaciones similares. Esto aumentará el consumo de refrescos en México, el mayor consumidor en el mundo, agudizando la epidemia de obesidad y diabetes. El Estado debe enfrentar esta situación y una de las maneras es a través del impuesto, el etiquetado y la publicidad”, declaró Alejandro Calvillo, nuestro director de El Poder del Consumidor.