CNDH pide controlar la chatarra en las escuelas

La obesidad infantil es un problema de salud pública

12 julio 2010. La postura de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acerca de la comida chatarra en las escuelas es clara: «Las autoridades deben anteponer el interés superior de la infancia en las resoluciones que adopten respecto de la venta de comida chatarra”.

El organismo indicó que es importante “hacer efectivo el derecho de los niños a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud, educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral”. Bajo esa premisa, la CNDH dijo que “es necesario que autoridades escolares, maestros y padres de familia supervisen los productos que se expenden en las cooperativas escolares, cafeterías y tiendas concesionadas en los planteles”.

La CNDH indicó que la decisión sobre la venta de estos productos, debe tomar en cuenta que la obesidad infantil es un problema de salud pública cuyas consecuencias pueden generar daños de difícil o imposible reparación, como problemas cardiacos, circulatorios y de diabetes.

Asimismo, el organismo indicó que “cuando los menores están en las escuelas, tanto las autoridades de las mismas como los maestros asumen la función de custodios, por lo que en ellos recae la responsabilidad de vigilar que se cumplan los derechos de niños mexicanos».

En los planteles escolares también “deben impulsarse el deporte y la realización de actividades tendentes a evitar que los alumnos asuman una actitud pasiva y sedentaria durante el horario escolar”.

La CNDH puso a disposición de los interesados el teléfono 5631-0040 (extensiones 2118, 2314, 2333 y 2375), para orientación sobre la salud de menores.

Chatarra contra los derechos humanos
En febrero pasado, El Poder del Consumidor presentó una queja ante la CNDH porque distintas áreas de gobierno han violado acuerdos internacionales y leyes nacionales al permitir que la comida chatarra invada todos los ambientes infantiles.

Esto implica violaciones a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, a la Declaración de los Derechos del Niño, a la Convención de los Derechos de la Infancia, al Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Políticos, Sociales y Culturales y a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

En particular, la queja se enfoca al desempeño de la Secretaría de Salud, de la Secretaría de Educación Pública y de la Procuraduría Federal del Consumidor, ya que han cometido violaciones por omisión al derecho a la salud de la población más vulnerable. > ver detalles

Esta denuncia también fue suscrita por otras organizaciones civiles y de derechos humanos como la Red por los Derechos de la Infancia en México, Al Consumidor, El Barzón, así como decenas de académicos en temas relacionados con el sector infantil.

La diabetes infantil
Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advirtieron que la alta prevalencia de sobrepeso y obesidad en niños mexicanos ha desencadenado que menores de entre seis y siete años sufran diabetes mellitus tipo 2, enfermedad que tiene en la obesidad una de sus causas principales.

La doctora Mónica León Valadez explicó que los casos de diabetes tipo 1 (por deficiencia de insulina) y de tipo 2 (por resistencia a la insulina) se presentan con igual frecuencia debido a los cambios en el estilo de vida de los menores: inadecuada nutrición y poca actividad física.

En la diabetes tipo 1, los menores sufren mucha sed, dejan de comer, orinan con frecuencia, se sienten muy cansados y disminuyen su actividad en un tiempo aproximado de tres semanas.

En la diabetes tipo 2, el niño presenta cambios similares pero en un lapso mayor, por lo que los padres se dan cuenta de su condición hasta meses después, cuando llegan al hospital por una descompensación o infección.