Crece la oposición a las supervías

Degradan la calidad de vida, contaminan y deterioran áreas naturales

28 julio 2010. No importa de qué ciudad mexicana se trate, el problema es recurrente. Las vialidades rápidas elevadas para automóviles provocan inequidad, impactos sociales y ambientales, especulación inmobiliaria, así como muy altos costos de construcción. Son un gran negocio, pero no resuelven las necesidades de transporte.

En esto coincidieron asociaciones civiles y académicos del DF, Guadalajara, Morelia, Cuernavaca y Querétaro, durante el foro ciudadano “Impacto de obras viales en el entorno social y ambiental”, realizado el 25 de julio en la ciudad de México.

Ante la similitud de los casos, las organizaciones asistentes propusieron conformar una alianza nacional en contra de las propuestas de obras urbanas que a un mismo tiempo degradan la calidad de vida de los habitantes, incrementan emisiones contaminantes y, en muchos de los casos, deterioran áreas naturales.

Morelia. El biólogo Tonatiuh Martínez Varela relató que hace años que el movimiento ecologista en Morelia ha defendido el área natural protegida La Loma de Santa María (232 hectáreas) de los intentos de construir vialidades en su territorio, como punta de lanza de posteriores desarrollos inmobiliarios. Destacó que más de 30 académicos han respaldado esta lucha porque esta zona posee una gran diversidad biológica, es importante para toda la cuenca y es la principal área verde de Morelia.

A la invasión urbana sobre La Loma de Santa María, el gobierno local ha sumado proyectos de vialidades para cruzar esta reserva mediante un “Megapuente” (en 2006) y posteriormente un “Megatúnel” (2007). Al encontrar una fuerte oposición ciudadana, el gobierno decidió quitarle la categoría de “área natural protegida” (31 de diciembre de 2009), violando para esto varios procedimientos.

“Nos quieren vender la idea de que esta vialidad será la solución a los problemas de tráfico. Sin embargo, en realidad buscan conectar con el resto de la ciudad un nuevo centro comercial y zonas residenciales (poco habitadas), para aumentar las ganancias de inversionistas privados”, afirma Tonatiuh Martínez.

Ver más del caso, aquí.

Cuernavaca. Francisco Valverde, dirigente del Movimiento Ciudadano Plan de Ayala, comentó: Cuernavaca, con todo y sus problemas urbanos, es reconocida internacionalmente por su clima, sus escenarios naturales, por ser, en suma, la Ciudad de la Eterna Primavera.

La propuesta del presidente municipal, Manuel Martínez Garrigós, para construir un segundo piso en la Avenida Plan de Ayala contradice esta tradición, ya que da prioridad a los automóviles en vez de a las personas y al ambiente.

Es cierto que Cuernavaca es ya una metrópoli que requiere urgentemente de soluciones en materia de movilidad urbana, por ello requiere de proyectos urbanos sustentables y amigables con el medio ambiente que atiendan los problemas de sus habitantes de forma integral y fortalezcan nuestra vocación e identidad.

Querétaro. Vecinos de esta ciudad comentaron que se ha impulsado un modelo de ciudad-dormitorio con mala movilidad. “La gente vive lejos de las zonas de empleo”, dicen, y citan como ejemplo el caso de Juriquilla. Este esquema urbano dificulta el uso de bicicletas; sólo da espacio a los automóviles: por todos lados cruzan autopistas.

Ahora está en riesgo Peña Colorada, una extensión de 1,500 hectáreas que actúa como zona de recarga de los acuíferos que abastecen a la ciudad de Querétaro. Esto es relevante en una región donde el líquido escasea.

Existe un proyecto urbano que propone fragmentar esta área natural para urbanizarla.

En todo el país, sin importar el partido gobernante
Estos casos se suman proyectos de obras con similares características como Monterrey, Aguascalientes y, por supuesto, la Ciudad de México.

Por ello, las organizaciones asistentes propusieron conformar una alianza nacional en contra de las propuestas de obras urbanas que a un mismo tiempo degradan la calidad de vida de los habitantes, incrementan emisiones contaminantes y, en muchos de los casos, deterioran áreas naturales.