Con deficiencias, inicia operaciones el Mexibús
Urge resolver problemas que demeritan la calidad del servicio
30 noviembre 2010. Al entrar en operación los 16 kilómetros de la primera ruta de Mexibús en el Estado de México, de Ciudad Azteca a Tecamac, El Poder del Consumidor solicitó al Gobierno del Estado de México que de manera urgente atienda los rezagos de este sistema, mismos que mantienen la operación por debajo de su nivel óptimo.
Es el caso de las fallas que se están presentando en el sistema de prepago mediante tarjeta, cuya lentitud en el servicio de recarga está provocando aglomeraciones de usuarios. “Los tiempos de recarga expeditos son fundamentales para mantener un nivel de servicio eficiente”, señaló Daniel Zamudio, de la campaña de Transporte Eficiente de El Poder del Consumidor.
Por otro lado, un elemento crítico que atenta contra la seguridad de los usuarios es el carácter provisional de los puentes peatonales. Al hecho de que varios puentes no cruzan toda la avenida sino solamente cubren los carriles por los que circula el Mexibús, se suma el problema de que casi todos los puentes de acceso al sistema son estructuras endebles, con andamios, que provocan temor a los usuarios al grado que prefieren cruzar a la carrera la avenida poniendo en riesgo su integridad física.
De hecho, ante los accidentes ocurridos a los pocos días de que el sistema iniciara operaciones, como sucedió en la estación Jardines de Morelos, y ante la presión de los vecinos, fueron asignados oficiales de seguridad pública a todas las estaciones para invitar a los usuarios a utilizar los puentes, aun cuando en ellos prevalecen los problemas de accesibilidad y estabilidad.
Los propios usuarios advierten que “los puentes no aguantarán el uso de la gente”.
Otro aspecto que urge atender es la integración tarifaria, con el fin de reducir costos para el usuario, pues éste percibe al Mexibús como un servicio adicional que le incrementa el gasto cotidiano en transporte.
Atender estas deficiencias daría al sistema su nivel óptimo, del que ya se aprecian algunas características: una significativa reducción en los tiempos de traslado; la instalación de cámaras de vigilancia al interior de cada unidad; una infraestructura adecuada dentro de las terminales para ascenso, descenso y transferencia modal de manera rápida, segura y ordenada.
Además cuenta con dos servicios: el ordinario, con paradas en todas las estaciones, y el expreso, que sólo se detiene en 5 estaciones y cuenta con carril de rebase.
Este carril de rebase permite acortar los tiempos de traslado en este trayecto, pues antes eran de 2 horas, mientras que con el servicio ordinario del Mexibús bajará a 45 minutos, y con el expreso se estima que podrá ser inferior a 30 minutos. Estos tiempos de recorrido fueron constatados por El Poder del Consumidor en la primera etapa del Mexibús (Ciudad Azteca – Central de Abastos, Ecatepec), donde el sistema ya operaba con una velocidad promedio de 40 km/h.
Asimismo, destaca la adecuación realizada en las 5 estaciones que ofrecen servicio ordinario y expreso, ya que el usuario puede pasar de un modo de servicio al otro de manera sencilla y rápida. Sin embargo, resulta cuestionable que el techado de la estación no cubra el tramo en el que los usuarios pasan de un tipo de sistema al otro, pues bajo condiciones climáticas extremas se verán afectados aunque estén dentro de la estación.
También es lamentable que se haya desaprovechado la oportunidad de crear bici-estacionamientos en varias estaciones que cuentan con espacio para este propósito, lo cual daría a los usuarios la oportunidad de efectuar su primer y último trayecto en un vehículo no motorizado, cuyo uso es sencillo, saludable y no contaminante.
El conjunto de carencias señaladas, de mantenerse, puede opacar las virtudes del sistema, ya que demeritan el servicio y la seguridad del usuario. Por ello, solicitamos al Gobierno del Estado de México que intervenga en este asunto, antes de que esta línea de Mexibús alcance su aforo potencial calculado en 130 mil usuarios.
Gerardo Moncada, coordinador de Transporte Eficiente de El Poder del Consumidor AC, señaló: “Lo peor que puede sucederle a una primera línea de BRT (Bus Rapid Transit), como esta ruta del Mexibus en el Estado de México, es que no corrija las deficiencias al comenzar a operar, porque los usuarios se crean una imagen negativa de este servicio, a pesar de que la experiencia ha demostrado que la implementación de un BRT resuelve eficazmente los problemas de movilidad”.