Atrapa la chatarra: participa en concurso fotográfico
• Las dos mejores fotografías recibirán como premio una cámara fotográfica de alta calidad.
• Revisa las bases en alianzasalud.org.mx/atrapalachatarra.
• La publicidad chatarra dirigida a la infancia va desde el logo de una refresquera en el interior de una escuela, hasta la publicidad en televisión, internet, el interior de supermercados, los regalitos y promociones, incluso los propios empaques de los productos donde claramente el diseño está dirigido a los niños.
• El costo total en campañas publicitarias de 11 golosinas sólo en televisión de enero a agosto del año 2012 fue de $408’776,124 pesos.
2 julio 2013. Ante el grave daño que está causando la publicidad de comida chatarra y bebidas endulzadas a la salud de la infancia, y ante la falta de regulaciones de este tipo de publicidad por parte del Estado mexicano, la ALIANZA POR LA SALUD ALIMENTARIA —de la que somos parte— lanza la campaña “Atrapa la Chatarra”.
El gobierno mexicano incumple su obligación de proteger la salud de la infancia mexicana que presenta uno de los mayores índices de sobrepeso y obesidad en el mundo, desoyendo el llamado de la Organización Mundial de la Salud a “proteger a la infancia contra este tipo de publicidad que daña su salud”.
“Atrapa la Chatarra” llama a los ciudadanos a registrar en imagen la publicidad de comida y bebidas chatarra dirigida a la población infantil y adolescente subiéndolas a las redes sociales, con el fin de realizar un testimonial ciudadano y exigir a la autoridad que regule este tipo de publicidad cumpliendo su obligación de proteger los derechos de la infancia y adolescencia, proteger el derecho a la salud y el derecho a una alimentación saludable.
Las dos mejores fotografías, calificadas por votos en línea y por un jurado, recibirán como premio una cámara fotográfica de alta calidad (cámara reflex digital de 24 Megapixeles, Video Full HD, con WIFI) y formarán parte de una galería testimonial que permitirá denunciar y presionar al gobierno para una verdadera regulación de este tipo de publicidad.
Miembros de la ALIANZA POR LA SALUD ALIMENTARIA explicamos que de acuerdo con criterios de la Organización Mundial de la Salud, de la Organización Panamericana de la Salud y de UNICEF se elaboraron las bases para esta campaña/concurso que pueden ser consultados en: alianzasalud.org.mx/atrapalachatarra.
Explicamos que se considera como publicidad chatarra dirigida a la infancia aquella que va desde el logo de una refresquera en el interior de una escuela, hasta la publicidad en televisión, internet, el interior de supermercados, los regalitos y promociones, hasta los propios empaques de los productos donde claramente el diseño está dirigido a los niños.
“El gobierno mexicano ha sucumbido a los intereses de la industria procesadora de alimentos y bebidas al no establecer una regulación de la publicidad dirigida a la infancia y al aceptar códigos de autorregulación y compromisos empresariales que mantienen las prácticas que están dañando los hábitos de alimentación de la infancia y adolescencia en México. Funcionarios de Secretaría de Salud anunciaron que se regulara este tipo de publicidad y etiquetado como parte de la Estrategia Nacional contra el Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes. Sin embargo, tenemos serias dudas de que así sea por los fuertes vínculos que esta empresas han tenido con las autoridades”, señaló Alejandro Calvillo, nuestro director de El Poder del Consumidor.
El gobierno está incumpliendo con los tratados y los estándares internacionales como la Convención Americana de Derechos Humanos, el Pacto de Derechos Económicos Sociales y Culturales, y la Convención sobre los Derechos del Niño y con la misma Ley General de Salud, al violar el derecho a la salud de niños, niñas y adolescentes, quienes son el grupo de población en el que tiene mayor impacto la publicidad engañosa de las empresa.
Una iniciativa de las empresas para evitar la regulación gubernamental fue el establecimiento en 2009 de un código de autorregulación de la publicidad de alimentos y bebidas dirigida a la infancia, conocido como código PABI, un código sin ningún criterio nutricional ni control a sus mecanismos de manipulación y engaño más recurrido por este tipo de publicidad como lo son los “regalos” y el uso de personajes populares.
El 10 de febrero del 2010, las principales empresas de alimentos se comprometieron ante la Secretaría de Salud a no dirigir publicidad a menores de 12 años de aquellos productos que no “cumplan con los criterios nutrimentales basados en evidencia científica y sean consistentes con lineamientos nutricionales aplicables”.
Por su parte, Alma Meneses de la Red por los Derechos de la Infancia, declaró: “Las empresas no han cumplido con su compromiso de no realizar publicidad engañosa, dirigida a niñas, niños y adolescentes, pues en los últimos dos años aun han presentado campañas basadas en las imágenes de super-héroes y personajes infantiles, además de manejar mensajes relacionados con la unidad familiar entre padres e hijos. Desde la Red por los Derechos de la Infancia, consideramos que este tipo de publicidad violenta el derecho a la información de niñas y niños pues no se les está informando de forma real sobre los perjuicios y características del producto, además de influir en forma radical en la formación de malos hábitos alimenticios, lo que violenta su derecho a la salud. Sabemos que la problemática es compleja y que no basta con la regulación jurídica para disminuirla, es por ellos que a través de este concurso buscamos un acercamiento y concientización del público en general sobre el impacto que tiene este tipo de publicidad en nuestras vidas”.
Los integrantes de las ONG añadimos que el costo total de inversión en campañas publicitarias para únicamente 11 golosinas y sólo en televisión de enero a agosto del año 2012, fue de $408’776,124 pesos. En contraparte, esa cantidad supera lo destinado para la campaña de prevención de la obesidad por parte del gobierno federal en ese año”.
La ALIANZA POR LA SALUD ALIMENTARIA anunció que está dirigiendo comunicados a los corporativos que en 2010 de manera voluntaria se comprometieron ante la Secretaría de Salud a no realizar publicidad dirigida a la infancia de alimentos y bebidas que no fueran saludables, de acuerdo con sus propios criterios.
Estamos solicitando a estos corporativos nos den a conocer estos criterios en un periodo de 15 días. Las respuestas de las empresas serán dadas a conocer en conferencia de prensa frente a la Secretaría de Salud.