Radiografía de… Vive 100%

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11 agosto, 2015 | : Análisis de productos

Vive 100% (envase de 400 ml.)

9½ cucharadas cafeteras de azúcar añadida por envase, cubre el 192% de la cantidad máxima tolerada para un adulto.
Contiene 18 ingredientes, entre ellos varios aditivos, como taurina y cafeína.
Contiene caramelo IV, clasificado como cancerígeno.

11 agosto 2015. Échale un vistazo a nuestras nuevas radiografías de productos. Ahora más sencillas y concisas, pero igual de documentadas.

Vive 100% (envase de 400 mililitros):

Azúcares:

48 gramos de azúcares añadidos o el equivalente a 9½ cucharadas cafeteras de azúcar para el envase de 400 mililitros.

Esta cantidad cubre el 192% de la cantidad máxima tolerada para un adulto.¹

Se han demostrado directas asociaciones ante el alto consumo de azúcares y la dependencia a la misma.

Es importante que tanto padres de familia como adolescentes (población a quien principalmente se dirige el producto) conozcan los riesgos ante el alto consumo de azúcares.

Dado su carácter adictivo, suele ser mucho más fácil que su consumo se convierta en hábito.

Existe amplia evidencia sobre el consumo de bebidas azucaradas y el impacto negativo en la salud por su vínculo directo con padecimientos como obesidad, síndrome metabólico y diabetes.²

Sodio:

104 miligramos por porción.

Esta cantidad cubre el 5.2% del total recomendado para un adulto (2,000 mg).³

De acuerdo con la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard se recomienda disminuir el consumo de sodio, ya que su alto consumo pueden llevar a padecer presión alta, enfermedades del corazón e infartos.⁴

Ingredientes:

Agua carbonatada, azúcar, ácido cítrico, taurina (300 mg/100 ml), saborizantes naturales e idénticos al natural, citrato de sodio, ácido ascórbico, benzoato de sodio y sorbato de potasio, EDTA disódico cálcico, cafeína, color natural caramelo IV, extracto natural de té verde (min. 0.005%), niacina, ácido pantoténico, vitamina B6, vitamina B12, carotenos naturales.

18 ingredientes en total, entre ellos, taurina, cafeína, té verde, aditivos artificiales y naturales, vitaminas.

Además de tener altas cantidades de azúcar ―lo que por sí solo es estimulante y adictivo― contiene taurina.

Algunos estudios han evidenciado la relación existente entre la taurina sintética y enfermedades que van desde la hipertensión arterial hasta derrames cerebrales, convulsiones y cardiopatías.

Por estos motivos ha sido prohibida en algunos países escandinavos, luego de que se vinculara a la muerte de tres consumidores.

Debido a que el organismo utiliza la taurina durante la realización de ejercicios y en momentos de estrés, se ha convertido en un ingrediente popular en las bebidas energéticas. Sin embargo, la taurina tiene un efecto estimulante sobre el sistema nervioso central.^5/sup>

Además, entre sus ingredientes se encuentra el color caramelo IV, ingrediente clasificado como cancerígeno en el Estado de California en Estados Unidos.

Etiquetado:

Todo el etiquetado y las leyendas (inclusive el nombre del producto en sí mismo) inducen a creer que es una bebida energética.

Sin embargo, en la parte inferior se presenta como una simple bebida carbonatada con vitaminas, cuando contiene taurina, cafeína, té verde (ingredientes no siempre aptos para todos los grupos de edad).

En su comercial en televisión sí se alerta sobre su consumo: “No consumir más de una unidad al día”.

También lo hace con una leyenda precautoria que establece: “No se recomienda su consumo en menores de 12 años, mujeres embarazadas o lactando, personas sensibles a la cafeína, ni la mezcla con bebidas alcohólicas, no consumir más de una unidad al día”.

Esta leyenda es bastante importante, y aunque aparece en su comercial en televisión no aparece en su etiquetado.

Por supuesto, estas leyendas precautorias deberían estar en los etiquetados para que la población esté consciente de los riesgos ante el consumo de este tipo de productos, pues hay estudiantes que pueden llegar a consumir incluso más de una al día.

Es necesario que el Estado proteja a la población de etiquetados engañosos o inductivos de productos que pueden ser un riesgo a mediano o largo plazo para la salud.

Esto es de carácter imperativo, especialmente en nuestro país, ya que vivimos una grave epidemia de sobrepeso, obesidad y diabetes en todos los grupos de la población.